Input 1) «Sólo viendo las cosas sin prejuicios se consiguen los mejores análisis y soluciones»
Es muy común oir el comentario sobre lo ocurrente que llegan a ser las reflexiones de nuestros niños, pequeños o adolescentes. Esas respuestas ingénuas de los niños te dejan pensando lo complicado que pensamos los adultos y la cantidad de variables u opciones que despreciamos por una viciada forma de razonar.
Input 2) «Si lo sé no me meto en esta»
Hace un par de semanas, en una sesión de formación a la que asistí como parte del grupo de EO (Enterpreneurs’ Organization) Madrid, estuvimos incidiendo en muchas de las precauciones que un Administrador de una sociedad debe tener en cuenta, en tiempos de crisis y de no crisis, al fin de desempeñar correctamente su responsabilidad legal como Adminsitrador…Y es que, aunque parezca mentira, después de muchos años al frente en la empresa, a todos se nos olvida un poco que, además de pensar en la estrategia, en conseguir clientes, de vender, de cuidar que el trabajo se realice con profesionalidad, de seleccionar el equipo, de motivar y cuidar a la gente, perserguir los cobros, pagar diligintemente todas tus nóminas, impuestos, proveedores, conseguir una contabilidad fiel, analizar proyectos, riesgos, rentabilidades, vigilar los procesos para cumplir con nuestra iso-9001, negociar con los bancos….. a uno se le olvida que, por encima de todo, un administrador tiene que realizar muchas formalidades para que queden siempre protegidos los intereses de los accionistas, los empleados, los clientes, los proveedores con todos los aspectos legales que esto conlleva.
Recuerdo el comentario de alguno de mis colegas «emprendedores», al salir de dicha sesión de formación, que lo resumía casi todo: «…entran ganas de volver a ser asalariado…»
(he de decir que creo que todos lo decíamos con la boca pequeña).
Input 3) «Cuando la formación desanima al más pintao»
Un amigo con el que cené el otro día aprovechando que coincidimos en el HIT, y que es una persona con mucha visibilidad sobre todos los datos estadísticos de proyectos, financiación, ayudas, tipos de emprendedores e inversores, etc… me comentó que curiosamente la estadística dice que los menos emprendedores son las personas que han estudiado empresariales / económicas.
Input 4) «Qué bien ve habría venido que alguien me hubiera contado bien todas estas cosas hace unos años»
Después de algún master o programa de perfeccionamiento directivo, muchos han dicho (yo el primero), con lo odiosas que me parecían estos temas hace unos años y qué útiles me parecen ahora ciertas cosas después de unos años en la dirección…¿Cómo hemos menospreciado la contabilidad de esta manera? ¿cuánto esfuerzo en hacer proyectos y luego estamos dejando que se estropeen los números por no prestar la atención debida a este u otro aspecto financiero? Está bien tener claro tu plan para estructurar tu deuda pero lo mejor de todo es que puedo saber si me interesa o no financiarme externamente….¿cómo es posible que no se incluyan en el bachiller algunas asignturas básicas para gestionar un negocio? ¿por qué me parecían aburridas las asignaturas de derecho y de contabilidad financiera en los últimos años de teleco?
Input 5) «¿Se pueden montar empresas sin plan estratégico desde el día 1?
En las presentaciones de proyectos antes foros de inversores veo que muchas empresas son iniciadas por personas que acaban de terminar un MBA. También, dado que lo que se presenta es un plan de negocio y en 10 minutos no puede presentarse una capacidad del equipo que lo inicia, no hay más remedio que realizar una presentación tradicional top-down, oportunidad de negocio, mercado, posicionamiento, estrategia, business-plan, y de ahí deducir la financiación, pensar en los procesos, determinar el organigrama teórico y luego buscar la gente. Resulta que a los 6 o 12 meses de empezar la empresa, lo más probable es que el BP haya cambiado con la experiencia sobre el terreno y las estimaciones más , los procesos críticos hay que repensarlos, el organigrama depende más de la gente inicialmente seleccionada que del plan inicial, y hay que replantear en consecuencia la financiación.
En mi caso, por un lado he invertido en empresas que se han montado de esta forma: algunas han salido bien pero otras no (de momento la estadística sigue siendo muy buena). Mi conclusión es que lo más importante es el equipo y su capacidad de adaptación. Por otro lado, mi día a día, está en ayudar a mi empresa core (medianet.es) a ir pasito a pasito…: cuando aprendemos a hacer algo bien, nos planteamos si puede ser estratégico potenciarlo o no…cuando ganamos un poco de dinero, pensamos en cómo reinveritrlo en algo que nos diversifique o que nos complemente, cuando encontramos una persona clave que encajaría en nuestra organización, pensamos en si debemos reformular de alguna manera el organigrama…Digamos que es un desarrollo de empresa más orgánico, más autofinanciado, más down-top porque a todos los que estamos dentro nos preocupa que esta empresa siga aquí muchos años más y no es una apuesta de esas de… si sae bien que sea un pelotazo y si sale mal pues a por la siguiente.
Input 6) La experiencia no es buena ni mala
Energía y capacidad de innovación es directamente proporcional a inexperiencia. Resultado es directamente proporcional a energía pero también a foco. Foco es directamente proporcional a conocimiento de sector, de compentencia, de funcionamiento de empresa y en definitiva de experiencia. Por tanto experiencia no es buena por exceso (falta de energía e innovación) ni tampoco por defecto (falta de foco sobre aplicaciones rentables de la energía).
Input 7) «¿Tengo un proyecto ganador o tengo un equipo ganador para algún proyecto?»
Creo que hay gente que sale a flote de cualquier situación y que con las condiciones de contorno adecuadas, y la motivación y energía necesarias, hará buena cualquier idea.
También que hay ideas y oportunidades de negocio que todo el mundo sabe analizar y que algunos tienen la ocasión de emprender pero que se pueden venir abajo por falta de flexibilidad del equipo para afrontar la incertidumbre, por falta de cohesión del equipo compartiendo riesgos y objetivos, por un mal diseño de la estructura de socios, etc…
Mi humilde estadística/experiencia es que hay personas con las que me iría al fin del mundo y sólo hay unas pocas ideas de negocio que me hacen «tilín»
Output:
Para un nuevo emprendimiento, parece que hay que combinar demasiadas cosas y veo que no deberíamos buscar cómo concentrar todas las habilidades en una persona por muy carismática o emprendedora que nos parezca…Dado que hay que conseguir ni mucha experiencia en gestión de empresa (acojone por todos los peligros por los que una empresa puede morir), ni poca (en mi caso veo con perspectiva mucho esfuerzo invertido en inventar la rueda de cómo se gestiona una empresa); veo idealmente un equipo empresarial donde unos tengan más experiencia y les guste la gestión y otros tengan menos experiencia y le guste la innovación, pero donde todos compartan la visión a largo plazo de lo que quieren que sea su empresa y que al mismo tiempo todos estén dispuestos a afrontar con enorme flexibilidad los futuros cambios de planes, que es casi lo único que es seguro cuando se inicia un proyecto.
Casi nunca nos toca un rol completamente definido por lo que, en mi caso, siempre que estoy gestionando procuro replantearme las cosas desde la raíz más profunda que soy capaz y siempre que estoy arrancando algo nuevo procuro no olvidarme de todos mis errores del pasado. Es la mejor forma que se me ocurre de no perder el valor que nos han dado los años y de no ser víctimas de nuestros años de experiencia.
PD: Este post esteá dedicado a nuestro buen amigo Ignacio que ayer cambio de status: de experimentado matrimonio de pareja …a… inexperto par de padres que van a reaprender las cosas más importantes de la vida junto a su niña. Felicidades!